Luis Resal, joven estudiante de Huesca, sufre la angustiosa situación de la ciudad en los primeros meses de la Guerra Civil. Su padre es encarcelado y él huye hacia la zona republicana. Se prepara en el regimiento de Barbastro para ser destinado en el frente de Alcubierre. Después regresa a Barbastro y Monzón, vive la dureza de la retirada y debe adaptarse a los avatares de la situación. Pasa por Binéfar y Lleida, y es hecho prisionero en la batalla del Ebro.
En esos tres años vivirá penalidades y momentos de indesición, será testigo de la represión en Huesca contra gentes de izquierdas y de la represión en la zona republicana contra las personas de derechas y contra los religiosos. Sus ideales le ayudan en una difícil supervivencia, pero a la vez surgen sentimientos humanos. Su visión de la vida y su nobleza lo marcan en todas las etapas y tendrá que aprender a convivir con los reveses del momento histórico que le ha tocado vivir.
Su amor, primero a Azucena, en Huesca, y luego a Julia, en Barbastro, su ímpetu juvenil, su relación con diferentes personas que le ayudan o le perjudican en uno y otro bando, le hacen pasar por situaciones peculiares, unas veces dramáticas y otras, incluso, divertidas.
El libro, sin renunciar a la fiabilidad de los datos históricos, busca en las relaciones humanas ante circunstancias de dificultad extrema y se recrea en aquellos detalles de la vida cotidiana que vivió y padeció toda una generación.